La Casa Blanca confirmó que el presidente Barack Obama autorizó enviar un pequeño contingente de tropas a una zona del norte de Siria controlada por los kurdos para asesorar a los opositores al régimen de Bashar al Assad que luchan en esa región contra el Estado Islámico (EI).
El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, detalló que el despliegue de un contingente de las Fuerzas Especiales, de menos de 50 miembros, busca mejorar las capacidades de la oposición “moderada” en el combate a los yihadistas.
Su misión principal será “ayudar a coordinar” los esfuerzos de esos rebeldes y de la coalición internacional de 65 países que bombardea desde el aire desde al año pasado a los yihadistas.
El anuncio supone un cambio sustancial en la política de Obama ante el conflicto en Siria, ya que se había opuesto hasta ahora a la presencia de tropas estadunidenses sobre el terreno en ese país.
Esto se produce un mes después de la entrada de Rusia en el conflicto sirio, con sus fuerzas dando apoyo al régimen del presidente Assad y atacando a todos los opositores, incluidos los insurgentes del EI.
Los cambios anunciados hoy en la estrategia contra el EI incluyen también el traslado a la Base Aérea de Incirlik, en Turquía, de aviones de ataque A-10, que prestan apoyo a tropas de tierra, y de cazas F-15, así como aumentar la ayuda militar a Jordania y el Líbano.