El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, prolongó el despliegue de la Guardia Nacional en su frontera con México ante el aumento de menores inmigrantes no acompañados que cruzan a Estados Unidos.
“Texas no se cruzará de brazos frente a este desafío. No vamos a ser víctimas de la apatía del Gobierno en asegurar nuestra frontera”, dijo Abbott al criticar que la Administración del presidente Barack Obama ha “ignorado” sus demandas para aumentar el número de patrulleros en la zona.
Y es que según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), entre octubre y noviembre cruzaron la frontera 10 mil 595 menores inmigrantes no acompañados, más del doble que en 2014, cuando fueron 5 mil 129.
En su mayoría provienen de Honduras, El Salvador y Guatemala.
Esta nueva oleada ha provocado la apertura de dos albergues en Texas y otro en California para acoger a todos los menores.
Este despliegue de la Guardia Nacional fue muy criticado por México, cuyo presidente, Enrique Peña Nieto, lo calificó de “discriminatorio” y “reprobable”.