La perla más grande del mundo estuvo escondida bajo el colchón de un pescador durante 10 largos años. No fue hasta que ocurrió un incendio en la vivienda de este hombre, que ha preferido mantenerse en el anonimato, que se pudo hacer público este hallazgo. Las fotografías difundidas en Facebook causaron el asombro de internautas y especialistas.
Un filipino encontró una perla de 34 kilos de peso mientras pescaba y la guardó en su casa para que le diera buena suerte. Eso ocurrió hace 10 años y hasta ese entonces desconocía el valor que esa gema tenía en el mercado.
“Él pensaba que no valía mucho la pena y la mantuvo escondida en su casa como un simple amuleto de buena suerte”, señaló a medios ingleses Aileen Cynthia Amurao, agente turístico de la ciudad de Puerto Princesa y conocida del pescador.