Llegar hasta las localidades más remotas de la geografía estatal para ofrecer acciones del primer nivel de atención médica, así como de promoción de la salud, de prevención y de odontología, es una tarea que realizan 42 Unidades Médicas Móviles, mejor conocidas como Caravanas de la Salud.
Con esta estrategia, la Secretaría de Salud del Gobierno del Estado, beneficia a 61 mil 616 habitantes de 910 localidades rurales, y los municipios de Calakmul, Candelaria y Hopelchén concentran 62.4 por ciento de la población bajo cuidado y responsabilidad de estas unidades móviles.
Asimismo, contribuyen en el fortalecimiento de las actividades curativas, preventivas y de promoción de la salud, con más de 37 mil consultas, más de tres mil acciones de promoción y prevención, y un total de 920 pacientes referidos al segundo nivel de atención médica.
Considerando las condiciones del terreno y caminos, en algunas rutas se establece puntos estratégicos, en coordinación estrecha con hospitales de segundo nivel, centros de salud y equipos de salud itinerantes, unidades médicas móviles de atención con equipo especial complementario de auxiliares de diagnóstico, tratamiento y enlace satelital de telemedicina.
De esta forma, es importante que los ciudadanos sepan que entre las funciones del médico en esta unidad móvil, destaca participar en la elaboración del diagnóstico de salud de su microrregión, así como mantener actualizados los expedientes técnico-familiares de esta población y también coordinar la elaboración del programa de trabajo de la unidad de salud a su cargo.
Así como ejercer en el campo de la atención médica y cumplir con el volumen y calidad de las metas establecidas en los programas de: Promoción General y Protección Específica; de Diagnóstico Temprano y Tratamiento Oportuno; de Prevención y Curación de Invalideces Físicas y Mentales, entre otras.
También efectuar visitas domiciliarias para el control y seguimiento de los casos y brindar pláticas de educación para la salud, referir a los pacientes que, por la naturaleza de su enfermedad, no puedan ser atendidos en la comunidad, apoyar, asesorar y supervisar el trabajo del personal institucional y comunitario que se encuentra bajo su responsabilidad.
Asimismo, cumplir con el volumen y calidad de las metas establecidas en los programas de Educación para la Salud, Orientación Nutricional, Prevención y Control de Enfermedades Infecciosas y Parasitarias, Vigilancia e Investigación Epidemiológica, Salud Materno-Infantil, Salud Mental, Salud Ambiental, Control y Vigilancia Sanitaria, Planificación Familiar, etc.