Este lunes los centros educativos abrieron sus puertas para recibir a estudiantes de todas las edades; pequeños del nivel básico, del nivel medio superior y superior, regresaron a las actividades educativas cotidianas.
Portando sus uniformes blancos, sus mochilas y sus útiles escolares nuevos, los infantes se hicieron presentes poco antes de la siete de la mañana en las calles de la entidad, y junto con ellos, los vendedores ambulantes; un sector que fue considerado problema, desde que Campeche ocupó los primeros lugares en obesidad, según, la directora de Corresponsabilidad Social de la Secretaría de Educación, Lidia Berrón Osorio.
Este problema de salud sería atacado por las instancias de Salud, de Educación y hasta por el Gobierno Municipal; y a dos años de pretender iniciar una reubicación de vendedores ambulantes, todo sigue en promesas.
“A nosotros sólo nos corresponde verificar que se expendan alimentos en completas medidas de higiene, no podemos reubicar porque esa es tarea del Ayuntamiento de Campeche”, señaló el secretario de Salud, Alfonso Cobos Toledo al ser cuestionado sobre este sector, que en la administración de Carlos Rosado Ruelas, fue considerado “una plaga”.
“Pues veremos qué hacer, por lo pronto estamos verificando que al interior de las escuelas sólo se vendan alimentos exentos de grasas, alimentos ricos en vitaminas, en proteínas, y no promuevan la obesidad en los pequeños”, manifestó el secretario de Educación, Francisco Ortiz Betancourt, quien de igual forma se deslindó del problema de la venta de comida chatarra.
A decir del legislador Enrique Ku Herrea, a dos años, de que se alarmara a la sociedad con los altos índices de obesidad y de que se implementara la activación física, no se ha podido hacer frente al problema de los vendedores ambulantes, mucho menos se ha podido hacer conciencia en los padres, sobre la importancia de prevenir el sobrepeso en los infantes, evitando que consuman alimentos chatarra a la entrada y salida de los planteles.