En una situación crítica se encuentran los municipios de Calakmul y Hopelchén por el desabasto de agua potable que padecen, principalmente en este primero, donde los pozos son demasiado profundos y ello impide que el agua llegue a los hogares, manifestó el delegado Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, Nehemías Chi Canché.
“Es un problema delicado, porque afecta a prácticamente toda la población de Calakmul, en Hopelchén la situación en menos crítica pero no deja de ser importante, y es que en su momento el INPI cuando era CDI creó algunas pequeñas ollas para dar agua a estas poblaciones aunque no es suficiente”.
Aunque actualmente el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas no cuenta con un programa para apoyar directamente esta problemática, Nehemías Chi Canché comentó que se podría hacer a través de un proyecto productivo encaminado a ello.
Agregó que independientemente de trabajar múltiples opciones con los Ayuntamientos de estos municipios, ya se gestiona ante el Gobierno Federal a través de oficinas centrales para la creación de sistemas de filtración o alguna otra opción que mejore la escasez de agua que se vive tanto en Calakmul como en Hopelchén.