“Los frentes fríos ocasionan antojos de pan dulce y otros carbohidratos que favorecen el rápido incremento de peso, aunado a las cenas de Navidad y Año Nuevo, así como las novenas que son típicas, lo que genera que las personas incrementen de dos y hasta seis kilos en el mes de diciembre”, informó la nutrióloga Magda González Palomo.
Recomendó que en la Cena de Navidad y Año Nuevo se eviten las bebidas alcohólicas principalmente aquellas que van acompañadas de jugos que incrementan aún más el número de calorías.
También dijo que una opción es llevar una dieta rica en frutas y verduras durante el día para reservar el consumo de carbohidratos por la noche, ya que aseguró que en las cenas de las posadas no falta algún tipo de carbohidrato.
La nutrióloga pidió, sobre todo a las personas con alguna enfermedad crónico-degenerativa, cuidar su salud y no ponerla en riesgo por los festejos del mes, ya que pasado esto sufrirían las consecuencias que podrían ser irreversibles.