Por violaciones a la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticas e Históricas, personal del Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) Campeche, colocó este mediodía sellos de clausura en los pendones en los que se promociona el Centro de Salud Municipal a Bajo Precio, que colocó el Ayuntamiento de Campeche, y que se ubica en la esquina de la calle 10 con Circuito Baluartes.
La colocación de los sellos se realizó minutos antes de las 13:00 horas, en ambos lados de los dos pendones de herrería y, de acuerdo con la información obtenida, la Comuna tampoco tenía autorización alguna para pintar la fachada del local ni sustituir la puerta original de madera, por una de cristal, ni las remodelaciones realizada al interior del inmueble, centro de salud que fue inaugurado el día de ayer.
El personal del Instituto ingresó al inmueble en donde cuestionó al encargado, Bernardo Sasu Rodríguez si contaba con la Licencia de Obra del Instituto para la colocación de anuncios, la modificación del inmueble y cambio de pintura de la fachada, quien indicó ser solo el encargado.
En el lugar, los empleados federales indicaron no tenían autorización alguna para todo ello y afirmaron la obra ya estaba suspendida “nada más que al pintar la fachada, quitaron los sellos” y que los anuncios colocados tampoco estaban autorizados por la Ley de Monumentos Históricos.
-Hemos trabajado durante 20 años para mantener la zona de Monumentos Históricos en buen estado –indicó uno de los enviados del Instituto.
Los señalamientos fueron interrumpidos por un hombre joven vestido con el uniforme del Ayuntamiento de Campeche, quien acusó al personal del INAH de estar grabando, y quien se negó a identificarse.
Argumentó no se trataba de un lugar público, lo que rectificó rápidamente ante los señalamientos de los reporteros, para indicar que no estaba permitido. Dijo que se violentaban “temas de privacidad” porque había personas esperando recibir consulta médica, por lo que se le indicó no se tomaban imágenes de ellas, solo de los servidores públicos.
En tono altanero, elevando la voz, se negó a identificarse o a decir su nombre y vía telefónica pedir la presencia “de Jurídico” en el lugar y sin ocultar una sonrisa, dijo no poder dar su nombre.
Personal del INAH procedió al llenado de la documentación correspondiente para su entrega formal.