Ante las bajas ventas por la contingencia sanitaria por el Coronavirus, introductores de frutas, verduras y legumbres procedentes de la Ciudad de México y de Yucatán, bajaron prácticamente en su mayoría, las cortinas de las bodegas de la calle Nicaragua, a espaldas de la principal central de abasto de nuestra ciudad, el Mercado “Pedro Sainz de Baranda” y no se espera su regreso antes de una semana.
Durante un recorrido por esa arteria, se constató que en al menos diez establecimientos expendedores de papa, cebolla, jitomate, frutas como plátano, están cerrados.
Solo uno o dos, siguen operando, y señalan que lo harán mientras sea posible, pues las ventas se redujeron de manera importante y trabajan con lo que les queda y señalaron que los demás introductores empezaron a abandonar la zona desde el inicio de la presente semana.
Su regreso no será en breve, todo depende del desarrollo de la contingencia sanitaria.