El Club Piratas de Campeche anunció la contratación del venezolano e infielder Karexon Sánchez, quien se unió a la nave anoche en el primero de la serie en Tabasco ante los Olmecas, jugó como tercera base y fue colocado como octavo en el orden al bate.
De igual manera el club bucanero dio a conocer que causaron baja los dominicanos: Diory Hernández y Eddie Rogers. Por el momento el equipo jugará con cuatro importados.
Los Piratas están pendientes en dar a conocer los nuevos refuerzos.
Eso fue todo lo que informó el equipo en su nueva política de comunicación, sin dar mayores detalles sobre todo de su nuevo refuerzo.
El venezolano Karexon Jhonny Sánchez Hernández nació el 22 de agosto de 1987 en Caracas Venezuela, fue firmado a los 18 años por los Indios de Cleveland y se pasó siete temporadas en ligas menores e independiente, con porcentaje total de .242, conectó 56 cuadrangulares y remolcó 273 carreras. El año pasado con el Schaumburg en Liga Independiente conectó cinco cuadrangulares y 29 carreras remolcadas en 77 encuentros.
Es ambidextro y tira a la derecha. Anoche en su primer turno fue golpeado y en su segunda oportunidad disparó sencillo al jardín derecho.
Todos estos movimientos esto a raíz de los pésimos resultados que tienen al borde del abismo a la nave pirata y buscando que emerja después de la pausa del Juego de Estrellas.
Un fracaso total resultó la contratación de ambos peloteros novatos en la Liga Mexicana. Ese desconocimiento del circuito veraniego los hizo quedar como jugadores del montón lejos de ser verdaderos puntales de un equipo diseñado para ser ofensivo, pero que ocupa el penúltimo lugar de bateo colectivo con un paupérrimo promedio de .269, apenas dos milésimas encima del último lugar que ocupan los Leones de Yucatán, con .267.
Los dos jugadores dominicanos quedaron a deber a la afición campechana, incluso Diory Hernández, guardián de la tercera colchoneta, lideraba al equipo en errores con siete pecados, mientras que en ese aspecto Rogers se salvaba de la quema con únicamente dos pifias, pero además mostrando mayor versatilidad a la defensiva al jugar 29 partidos como outfielder y otros como tercera, segunda, paracorto e incluso primera base.
Hernández se fue bateando un pobre .256 en 41 encuentros con 156 turnos al bate, 20 carreras anotadas, 40 jits, siete dobles, no conectó triple, seis cuadrangulares y 21 carreras remolcadas, 21 veces por bolas, 20 ponches, un robo y siete veces bateó para doblepléi.
En tanto que Edward Rogers tenía mejor promedio con .282 en 40 encuentros e igual número de veces al bate que su compatriota, 156, 29 carreras anotadas, 44 imparables, dos dobles, sin triple, cuatro cuadrangulares, 20 carreras remolcadas, 14 pasaportes, 27 chocolates, cuatro robos y 10 veces bateó para doble matanza.