Un mal entendido fue el causante de que los dos sindicatos del Ayuntamiento de Campeche protagonizaran un “zafarrancho” en el interior y a las afueras de la Dirección de Desarrollo Social y Asuntos Indígenas, lo que derivó en la suspensión de labores por cerca de cuatro horas, congestionamiento vehicular y agresión a un grupo de trabajadores.
Todo inicio cuando el Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Gobierno Municipal, dirigida por Luis Chab Ruiz realizaba una junta de trabajo, con el fin de discutir temas pendientes de la vida del gremio; sin embargo, una falla en la energía eléctrica provoco que pusieran en funcionamiento una planta, la cual causaba mucho ruido molestando a trabajadores de la Sección sindical.
Esto provocó que los sindicalizados llamaran a Manuel Bonilla Carrillo y argumentaran que integrantes del gremio contrario estaban proyectando un video con imágenes comprometedoras hacia su persona, lo que molesto al líder y colérico acudió a la dirección armando un gran escándalo y empujando a las mujeres que intentaban dialogar con él.
Bonilla Carrillo al darse cuenta que no había proyección de por medio, dio pie a una serie de declaraciones entre las que destacaba la intención de desaparecer el sindicato contrario ya que el ayuntamiento tiene con uno.
“Lo que queremos es la destitución de ese grupito ya que lo único que está haciendo es causar divisionismo entre los agremiados y pedimos a las autoridades del ayuntamiento que tomen cartas en este asunto porque si no vamos a regresar a los tiempos del otro trienio de las dos agrupaciones, entonces lo que queremos es que se mantenga la estabilidad y que a este grupito ya lo pongan su lugar”.
“Si hubo su enfrentamiento porque nos pasaron un mortajo de que iban a proyectar cosas de mi vida personal y si fui a reclamarlo como no lo voy a reclamar no hubo golpes, solamente un choquecito, yo quería acercarme a Luis chab pero ellos ponen a las señoras de frente pero no hubo golpes y le pedimos al ayuntamiento que tome cartas en este asunto”, aseguró.
En tanto, Luis Chab, dirigente del SUTSGM, refugiado en la oficina del director de Desarrollo Social, señaló que el motivo por el cual visitó el área era para tratar asuntos de trabajo con sus agremiados, entre ellos, los descuentos que realizan a los trabajadores y la suspensión de cinco días de vacaciones, sin embargo, “la gente de Bonilla fue la que corrió el rumor de que estábamos proyectando algo de su vida privada y ahí inicio todo el problema”.
Por su parte, la alcaldesa de Campeche, Ana Martha Escalante Castillo significó que aunque fue un problema sindical, los llamó a la cordura y trabajar en beneficio del Ayuntamiento, sin embargo, dejo en claro que la comuna no pretende desaparecer a ningún sindicato, en todo caso el gremio mayoritario puede interponer una denuncia ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, acerca del comportamiento y en su caso conseguir que no sea reconocido.