En punto de la 1:30 pm, maestros manifestantes que se encontraban en la Plaza de la República, se postraron en las puertas del Palacio de Gobierno, impidiendo la entrada y salida de las personas que laboran ahí, con la exigencia de hablar con el gobernador del Estado. Después de tomar el Palacio, decidieron tomar las entradas del Palacio Legislativo, que en ese momento se encontraban en sesión.
Las puertas del recinto legislativo fueron cerradas con una pancarta, y con cinturones amarraron las manijas de la puerta. Desde ese momento, no dejaron entrar ni salir a ninguna persona. Ni diputados ni trabajadores. Incluso la diputada, Yolanda Valladares Valle, vía twitter, mencionaba que no los dejarían salir.
El gobernador del estado, Fernando Ortega Bernés, en punto de las 5 pm, rindió su postura ante las manifestaciones, en la Secretaría de Educación, ahí mencionó que el gobierno de Campeche respalda la Reforma educativa, “La educación no se privatiza, es falso que los padres de familia vayan a pagar de más. Hago un llamado a que vuelva la normalidad y mi respeto a los maestros que no dejaron dar clases”.
Al finalizar el mensaje del Gobernador, un grupo de antimotines resguardaban la entrada de la Seduc, y otro más nutrido, se dirigió al Palacio de Gobierno.
Al lugar, llegaron antimotines, Policía Estatal Preventiva (PEP) y policía municipal. Después de cuatro horas de mantener cerradas las puertas, se dialogó con los manifestantes, pidiéndoles que dejaran salir a mujeres y niños, a lo que los maestros se negaron. Después de infructuosos intentos de buscar negociar, fue necesario de hacer uso de la fuerza. Es así que el grupo de granaderos, con sus escudos se dispusieron a retirarlos de los recintos.
Primero, desalojaron a los disidentes que tenían bloqueada la entrada del Palacio Legislativo. Después de haber retirado a los manifestantes, los antimotines se dirigieron al Palacio de Gobierno. Golpeando sus escudos, se acercaron a los maestros quienes no se quisieron retirar en ningún momento. Poco a poco fueron empujados y alejados del recinto, entre gritos e improperios.
2 cartuchos de gases lacrimógenos fueron lanzados para apaciguar la reyerta. Hubieron detenidos que fueron evacuados del lugar. Al final, los maestros fueron delimitados a la Plaza de la República. Un cerco de seguridad fue levantado. Por su parte, los maestros fijaron su postura de permanecer ahí y hacer guardia. Amenazaron con continuar la manifestación este jueves.
Se trató de entrevistar a los líderes de los maestros pero ninguno quiso fijar su postura de la razón por la cual se manifestaron a las afueras del Palacio o por qué retuvieron a los empleados que ahí laboran.