Para los diputados de oposición Yolanda Valladares Valle y Manuel Zavala Salazar, la presentación del primer informe de trabajo de la LXI Legislatura del Congreso del Estado, fue un ritual y protocolo establecido en la Constitución pero también una fiesta particular y un “·aplausometro” de lucimiento personal.
En entrevistas por separado, coincidieron en señalar que todos los informes son iguales, parte de un ritual y del protocolo que establece la Constitución.
A pregunta expresa, señaló que a los Poderes Ejecutivo y Judicial, las recomendaciones las hace el Legislativo, empero a éste, lo hacen los electores.
-A nosotros nos recomiendan nuestros electores, teóricamente. Es la crítica más difícil porque también uno de los oficios más satanizados es el del diputado y, obviamente, el diputado no puede ser removido de su función por no hacer nada, y ahora sí que a veces pagan justos por pecadores.
-A veces el actuar irresponsable de algunos diputados empaña la labor de todo un cuerpo legislativo, eso es innegable. Lo que haga un diputado no puede ser considerado como un ente aislado porque nos afecta a todos –finalizó.
Por su parte, Zavala Salazar dijo que este fue un año de pocos avances y que la sesión solemne fue una fiesta particular, y un “aplausometro” , un evento de lucimiento personal.
-Este es un Poder Legislativo que se ha suplantado y se ha convertido en ua verdadera Oficialía de Partes, todo aprobado “fast track”, reformas constitucionales que han pasado sin enterarse los ciudadanos, sin una auténtica discusión, que se aprueban desde el Pacto por México, con reformas mal llamadas estructurales.
-A un año de este Congreso las cuentas no son claras ni son de beneficio de los mexicanos y mucho menos para los campechanos, falta liderazgo, que inició con gran soberbia, con falta de tacto y sensibilidad; se sienten dueños del Legislativo. Es lamentable que donde debemos representar al pueblo, es a lo que menos se debe la mayoría de los diputados, tanto del PRI como del PAN.
Consideró fue un informe de cifras alegres, que dicen avanzamos pero estamos estancados.
-Afortunadamente hoy a los campechanos les queda claro que no hay avances, a nosotros nos pueden decir lo que sea, pero vamos a seguir en ese sentido.
En cuanto a la calificación al Congreso, Zavala Salazar comentó debe ser el pueblo el que alce la voz porque “no es intocable el Congreso, porque se debe al pueblo, es el que mando y debe exigir”.
Finalmente, señaló que el voto de castigo se dará en el 2015 y confió en que los ciudadanos decidirán libremente.