Científicos han identificado un llamado reloj biológico, que ofrece pistas importantes capaces de predecir la esperanza de vida de los seres humanos. Los investigadores de la Universidad de Edimburgo, en colaboración con científicos de Australia y EE.UU., han descubierto que con un simple análisis del ADN es posible calcular cuánto tiempo va a vivir una persona.
Los científicos calcularon el reloj biológico de las personas, comparando su edad real con la edad determinada por los cambios químicos en su ADN conocidos como la metilación. Observaron que las personas cuya edad según su reloj biológico era mayor que su verdadera edad eran más propensas a morir.
En cuatro estudios realizados por separado, los investigadores observaron la vida de unas 5.000 personas durante 14 años. La edad biológica de cada persona fue calculada a través de una muestra de sangre y los participantes fueron seguidos durante todo el estudio.
Los investigadores encontraron que hay cierta relación entre un reloj biológico que funciona más rápido de lo normal y la muerte prematura, incluso teniendo en cuenta otros factores como el tabaquismo, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.