El presidente de Argentina, Mauricio Macri, pidió el lunes ante sus colegas del bloque sudamericano Mercosur que Venezuela libere pronto a quienes consideró presos políticos, un reclamo que desató denuncias de injerencia del país caribeño.
La cumbre en Asunción del grupo que reúne a Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay y Venezuela estuvo marcada por el roce entre ambas naciones sudamericanas, que había empezado cuando el presidente argentino criticó la política de derechos humanos venezolana, incluso el mismo día de su victoria hace un mes.
Macri, un ingeniero de centroderecha que participó por primera vez en un encuentro del Mercosur, dijo que el bloque no debería tolerar la persecución política por razones ideológicas.
Aunque el presidente venezolano, el socialista Nicolás Maduro, no viajó por compromisos internos, su canciller Delcy Rodríguez acusó al mandatario argentino de interferir en los asuntos internos de su país en la cumbre.