La Asamblea Nacional de Venezuela, de mayoría opositora, rechazó un decreto de emergencia económica dictado por el presidente Nicolás Maduro, por considerar que no ofrece soluciones para acabar con la crisis en el país.
Y es que la economía venezolana atraviesa una profunda recesión, aunada a la inflación más alta del mundo y una escasez de bienes básicos, que se ha agudizado por el desplome de los precios del crudo, su principal fuente de divisas.
La oposición, que logró la mayoría parlamentaria en unas elecciones de fines del año pasado, dice que la crisis es el corolario de más de tres lustros de políticas socialistas que han arruinado la industria local y agravado la dependencia de los precios del crudo.
Negamos el decreto porque es más de lo mismo. Las mismas políticas conducen a los mismos resultados”, dijo el economista y diputado opositor José Guerra, presidente de la comisión encargada de evaluar el decreto. La bancada de la oposición dijo que no puede otorgar un “cheque en blanco” al Ejecutivo sin conocer el verdadero trasfondo del decreto y su difuso articulado, que admite amplias interpretaciones.