La fuga de Joaquín “El Chapo” Guzmán impactará en la frontera con México y recrudecerá la violencia de los carteles del narcotráfico, que han incrementado su ofensiva en Tucson (Arizona), el Valle de Río Grande y San Diego (California).
Esta advertencia la hizo el comandante del DHS, Robert L. Harris, encargado de supervisar la vigilancia de la zona suroeste de la frontera de Estados Unidos.
La huida de Joaquín Guzmán Loera (“El Chapo”) podría potencialmente instigar mayor violencia en la frontera, de manera similar a los incidentes que siguieron a la primera vez que escapó de prisión el capo, en 2001″, destacó Harris en la audiencia celebrada en la Cámara de Representantes.
En su intervención, Harris reconoció el “alcance e influencia” de los capos del narcotráfico, especialmente de Los Zetas, el Cártel del Golfo, el de Juárez, el Cártel Jalisco Nueva Generación y el del Pacífico, encabezado este último por “El Chapo”.
Además, Harris alertó de que el poder de estas organizaciones criminales se extiende más allá de la frontera que comparten Estados Unidos y México y alcanza a ciudades estadunidenses.
La amenaza de estas organizaciones de narcotráfico es dinámica. Son organizaciones rivales que están constantemente compitiendo por el control y, a pesar de los esfuerzos antidroga de Estados Unidos y México, los nuevos grupos surgen y se forman nuevas alianzas”, detalló el agente de Seguridad Nacional.