Sin atreverse a asegurar que el avión comercial de Malaysia Airlines fue derribado por misiles, el Consejo de Seguridad Holandés, encargado de la investigación, concluyó que la caída de la aeronave fue derivado de la perforación de “numerosos objetos de alta energía”.
Como recordará, el misterio del vuelo comercial MH17 surgió en julio pasado, cuando horas después del despegue del avión malasio que cubría la ruta Amsterdam Kuala Lumpur, desapareció de los radares, lamentablemente, horas más tarde se daba muestra del derribe del avión.
Aunque la investigación comenzó inmediatamente para dar explicaciones a los familiares de las víctimas que hasta el momento no todos han podido recuperar los cuerpos de los fallecidos, todo apunta a que se trató de acto terrorista donde el Boeing 777 habría sido derribado por un misil tierra-aire.
“El avión se partió en el aire, probablemente como resultado del daño estructural causado por un gran número de objetos de alta velocidad y energía que impactaron al avión desde el exterior”, señala el resultado de la investigación.
Los investigadores de la aviación holandesa basaron su información de los registros de datos de vuelo de la caja negra, del control de tráfico aéreo, imágenes de satélite y fotos de la escena para compilar el informe preliminar.
“El patrón de daño observado en el fuselaje y la cabina de la aeronave fue consistente para concluir que fue provocado por un gran número de objetos de alta energía que penetraron la aeronave”, concluye.
