Ariel Ávila, subidrector de la Fundación Paz y Reconciliación, declaró que el Cártel de Sinaloa ha puesto un precio a la cabeza de Walter Arisala, alias Guacho. De acuerdo al analista, el disidente de las FARC y cabecilla del Frente Oliver Sinisterra, es buscado por los narcotraficantes mexicanos por poner en riesgo las operaciones en la frontera con Colombia.
Según Ávila, el cese al fuego que planteó Guacho para entregar los cuerpos del equipo de prensa del diario El Comercio y a una pareja secuestrada, busca dos cosas: “mantener el canal abierto con el gobierno de Ecuador y solventar la crisis que hay en la frontera”.
Guacho es actualmente perseguido por el Ejército de Colombia y Ecuador, y este pedido, según plantea el analista político, hizo que el Cártel de Sinaloa ponga “precio a su cabeza porque como se dice popularmente, calentó el parche”. Es decir, ha puesto en exposición y riesgo todas las operaciones del cártel mexicano en la región.