Chivas Campeche no pudo y no supo cómo sacar jugo de su condición de local en el partido de “ida” de la final del Grupo II de la Liga Nacional Juvenil, Zona 01, categoría Sub-13 y fue superado apenas por la mínima diferencia 1 gol a 0 por Chivas Valladolid, en encuentro juego desarrollado en el campo Chivas Nueva Generación.
Ahora el rebaño campechano está obligado a ganar por diferencia de dos goles el próximo sábado cuando viajen a Valladolid para devolver la visita y cumplir con el trámite del partido de “vuelta” ante su par vallisoletano.
Ni con el respaldo de su afición, Chivas Campeche pudo en contra el camino y la fórmula para vulnerar el marco enemigo. El once local mostró el espíritu rojiblanco en estos tiempos, con la batucada de fondo, los campechanos mostraron su verdadero nivel en la cancha, donde la estrategia de ambos técnicos fue factor determinante en el resultado final, pues en la primera mitad las acciones se desarrollaron gran parte en la media cancha, en férrea lucha por el control del balón.
Clásico partido de finales, de mucha estrategia y la acciones y la lucha fue por el dominio del centro del terreno de juego, a los dos conjuntos les faltó “abrir” más la cancha, jugar por los costados, fue muy poco lo que se hizo por las bandas. El primer aviso de peligro lo dio el conjunto local en un avance por el centro donde Joaquín Carrión, quien regresó a la alineación titular, se combinó bien con Orlando Bojórquez y al pase a Jorge González, que le ganó a su marcador pero hizo una jugada de más y ya no pudo rematar cómodamente, por lo que se fueron al descanso repartiendo roscas.
Sin embargo, los equipos mostraron vocación ofensiva, siempre buscaron la meta enemiga, y en los primeros minutos del complemento fue cuando un error de la zaga defensiva de Chivas Campeche en jugada a balón parado, y con la jugada prefabricada cobraron los del Valladolid al centro del área y en la triangulación el capitán Carlos Maury recibió pase que conectó con la pierna izquierda, cruzó su disparo para vencer la estirada del arquero local Roni Lozano.
Fue un gol que cayó como balde de agua fría.
El desarrollo del encuentro siguió de la misma forma que en los primeros minutos donde el conjunto visitante mostró oficio, se mostraron como un equipo con amplia experiencia, se dejaban por cualquier cosa, se hacían los lesionados, afortunadamente la tercio arbitral comandada por Gilberto Alvarado y sus banderas, Jair Villanueva y César Silveira, hicieron que el partido no se detuviera mucho.
Chivas en los últimos 15 minutos del complemento, con los ajustes hechos por Marco Antonio Rincón Negrete, con el ingreso de Fernando Martínez, Jorge Chulín y Jimmy Concha, mejoró su juego y llegaron con opciones de peligro, la más clara fue por el sector izquierdo donde Orlando Bojórquez sirvió pase a Fernando Martínez, quien logró quitarse a su marcador pero su tiro salió por encima del arco. Tuvieron una segunda ocasión que la defensiva del Valladolid alcanzó a mandar a córner.
Así, la ilusión se mantiene pero el esfuerzo tendrá que ser doble el próximo sábado cuando viajen a Valladolid.