Una foto de Ivanka Trump junto a su pequeño hijo publicada este fin de semana en Twitter avivó la polémica sobre la suerte de los niños migrantes separados de sus padres tras entrar ilegalmente en Estados Unidos, una política del gobierno de su padre.
Un alto responsable del ministerio de Salud y Servicios Sociales estadounidense, Steven Wagner, declaró en abril ante una comisión del Congreso que el gobierno había sido “incapaz de determinar con exactitud el paradero de 1.475” menores que ingresaron de esa manera con sus padres y fueron colocados con familias de acogida, pues había no había podido establecer contacto con esas familias en los últimos tres meses de 2017.
La controversia que involucra a la hija y asesora del presidente Donald Trump se desató luego de que ella publicara la imagen en la que se le ve con su niño en brazos y que acompañó con el mensaje: “Mi <3! #MañanadeDomingo". Una foto en apariencia cliché pero que llevó a los internautas a contrastar esa situación con la de los niños migrantes separados de sus padres.