Este lunes, el papa Benedicto XVI firmó un decreto que permite adelantar el inicio del cónclave, el cual estaba previsto para después del 15 de marzo.
Mediante la carta apostólica en forma de motu proprio, titulada De nonnullis mutationibus, Benedicto XVI estableció cambios en 15 de 92 artículos de la constitución Universi Dominici Gregis, la cual fue promulgada en 1996 por Juan Pablo II, entre uno de los cambios se encuentra que en caso de que estén presentes todos los cardenales con derecho al voto, se podrá adelantar la fecha,
“Dejo al Colegio de Cardenales la facultad de anticipar el inicio del Cónclave si consta de la presencia de todos los cardenales electores”, añadió en el artículo 37 de esa constitución, donde incluyó además la posibilidad de aplazarlo 20 días.
Y es que hasta este domingo, era obligatorio la espera de 15 días desde el inicio de la sede vacante hasta el comienzo de las votaciones para elegir un sucesor, tiempo que está destinado para esperar a los electores ausentes.
Este decreto da una nueva facultad a todo el Colegio de Cardenales y no sólo a los votantes, consideró.
En próximos días, un total de 117 cardenales tendrán derecho al voto en el cónclave que elegirá dentro de la Capilla Sixtina al nuevo Obispo de Roma, y deberá contarse con una mayoría de dos tercios.
Benedicto XVI renuncia este 28 de febrero, por lo que a partir del 1 de marzo, inicia formalmente la sede vacante, día en que el decano del Colegio Cardenalicio convocará en la Ciudad del Vaticano a las Congregaciones Generales para decidir los detalles del gobierno de la Iglesia Católica y votar la fecha de comienzo del cónclave.