En medio de discusiones, jaloneos y uno que otro recordatorio materno, 7 huacaleritas fueron desalojadas del Mercado Principal “Pedro Sainz de Baranda” por ser las que mayor quejas han recibido por parte de los locatarios establecidos y por obstruir los accesos principales del centro de abasto, siendo un riesgo, de acuerdo a los lineamientos de Protección Civil.
En punto de las 8 de la mañana, la Subdirección de Mercados cumplió su amenaza, los inspectores iniciaron el desalojo de las humildes mujeres, en su mayoría personas de la tercera edad, inclusive, dos de ellas, denunciaron el despojo de su humilde mercancía, la cual ascendía a 400 pesos y si acudían a recogerla con las autoridades, la multa sería por una cantidad similar, por lo que optaron por dar por perdido el producto.
“Ahora me están quitando por una injusticia, porque están limpiando supuestamente, pero no lo están haciendo parejo. No tenemos un sueldo, vivimos de lo que vendemos”, dijo llorando María Luisa Pérez, huacalerita con más de 10 años de vender sus productos en el centro de abasto.
El abuso de autoridad por parte de los tres inspectores, derivó en que las huacaleritas acudieran al Ayuntamiento de Campeche a manifestarse y denunciar agresiones, de paso colocaron su venta para no perder el ingreso del día.
“A mí me decomisaron dos bultos de limón y cinco de naranja agria y yo si quiero y exijo que me lo paguen, a la compañera la están sacando y de eso viven, estudian sus hijos, no se vale que por capricho de un locatario nos estén dando estas cosas. Hay una persona golpeada, la señora Magdalena Miss Ya, no vino porque está amenazada también, pero le lastimaron un seno en el forcejeo”, señaló Renato Noh Tamayo, Huacalerito.
“Por qué nos están quitando, también tenemos derecho, como dicen ellos como son locatarios tienen derecho pero nosotros también tenemos hijos”, agregó Yadira Ordóñez.
Luego de varios minutos de espera, las huaceleritas recibieron atención del secretario de la Comuna, sin embargo, la reunión no se llevaría a cabo en Palacio Municipal, sino en el mercado principal, derivando en un viacrucis que inició en la calle 8 del Centro Histórico y culminó en el principal centro de abasto.
Mientras que las mujeres acompañadas de un vendedor, sufrían arrastrando su mercancía de vuelta al mercado principal, el secretario de la comuna, Carlos Moreno Hernández disfrutaba el momento, dándose su baño de pueblo y con una sonrisa de oreja a oreja paseando por el Centro Histórico.
Luego de 25 minutos de recorrido, los quejosos y el secretario de la Comuna arribaron a la Subdirección de Mercados, ahí, sostuvieron una reunión la cual duró unos escasos 20 minutos, pero la postura fue la misma, ubicación sólo en mercados periféricos y no en puertas de acceso.
“No hablamos de reubicación, hay que sentarse cada caso es especifico que ellos tiene, al señor Renato Noh le descubrimos un acuerdo de que el debería estar en el 7 de agosto, y ahí se va, en tanto las demás deben de revisarse”, dijo Moreno Hernández.
“Hay posibilidades que se reubiquen en la parte del 7 de Agosto. En ningún momento se ha utilizado la fuerza pública, hubieron jaloneos porque a nadie le va a gustar que se decomisen las cosas, pero en ningún momento hubo fuerza física”, agregó Juan Carlos Salazar Magaña, Subdirector de Mercados.
En total, serán 15 huacaleritas que han generado quejas y que serán reubicadas, no así, los introductores que se encuentran en la calle Nicaragua, y es que no sólo afectan a los peatones sino hasta los automovilistas; sin embargo, la medida unilateral fue justificada por las autoridades del mercado principal.