En Ecuador, se dio el último adiós a Christian Benítez, en donde el presidente, Rafael Correa asistió.
En compañía del vicepresidente Jorge Glas y de varios ministros de estado, el mandatario llegó junto al féretro y se quedó por varios minutos en silencio en aparente oración.
Por su parte, la federación ecuatoriana de futbol reveló que Christian Benítez padecía de un fallo cardíaco congénito que provocó el infarto que le costó la vida.
“Aunque hoy nos abandones, vivirás en el recuerdo amoroso de tu gente”, añadió Correa.
El médico de la selección ecuatoriana, Patricio Maldonado, explicó que en la madrugada del viernes se realizó una segunda autopsia al cuerpo de Benítez, que duró dos horas y media, que reveló que “el cadáver presentaba signos de una muerte súbita” derivada de problemas congénitos y arteriales.
Maldonado señaló que estos problemas “no se pueden detectar ni con exámenes muy sofisticados. Quiero recordarles que ‘Chucho’ Benítez ha pasado por muchos clubes, en los cuales han sido fundamentales los chequeos médicos, pero este problema no se detecta sino post mortem”.