Y es que las autoridades al momento de revisar el buque que presumiblemente transportaba azúcar, la tripulación se negó a colaborar y el capitán intentó suicidarse cortándose el cuello cuando se percató de que darían con las armas.
El barco se proponía atravesar el Canal que une el Atlántico con el Pacífico pero fue remolcado al muelle Manzanillo, un recinto privado del puerto de Colón, en el Caribe.
El registro puede durar días y ni Corea del Norte ni Cuba han dicho una palabra del asunto.
El ‘Chong Chon Gan’ transportaba en apariencia 255.000 sacos de azúcar de la mayor de las Antillas, una de las pocas naciones con las que Pyongyang mantiene relaciones.
El portavoz de la presidencia panameña, Luis Eduardo Camacho, puntualizó que la inspección “puede demorarse una semana. Apenas se ha abierto una bodega y quedan otras cuatro”.
Por su parte, el gobierno de Estados Unidos aseguró que apoya la decisión de Panamá de retener e inspeccionar el barco y ofreció su cooperación, pero evitó confirmar que el navío transportara armas de guerra o que procediera de Cuba, como indicó el presidente panameño, Ricardo Martinelli.