Estados Unidos sufre una nueva tormenta de nieve y vientos fríos, la cuarta en menos de un mes, con afectaciones al transporte aéreo y terrestre, hospitales y otros servicios en el noreste del país.
Autoridades implementaron la alerta en las poblaciones costeras de Rhode Island a Maine y se pronosticó un frente frío con temperaturas mínimas de 24 grados centígrados bajo cero.
Los meteorólogos recomendaron a la ciudadanía permanecer en sus casas para guarecerse de las extremas condiciones, mientras que los gobiernos de Massachusetts y Rhode Island pidieron a los automovilistas evitar salir.
Fueron cancelados unos 400 vuelos en el aeropuerto internacional de Boston y la autoridad de transporte canceló todos los servicios de tren, autobús y transbordador en la zona de la urbe debido a la visibilidad casi nula que existe.