Al asegurar que la violencia del país vecino le afecta a Estados Unidos, el Presidente Barak Obama, ofreció ayuda a México para investigar el caso de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala, Guerrero hace ya más de dos meses.
“Esto será investigado. Hemos ofrecido asistencia para saber exactamente lo que pasó, nuestras capacidades forenses se emplearán para llegar al fondo (…) Es un problema crónico de narcotraficantes, que en algunos casos toman el control de pueblos y regiones enteras”, dijo el mandatario en entrevista.
De acuerdo con Obama, Estados Unidos también puede cooperar en mejorar el sistema de justicia criminal y las capacidades de investigación de las autoridades, desde el nivel federal hasta los municipios. “Porque esto sí nos afecta. México es nuestro amigo y vecino. Queremos que prospere”.
En este sentido, el mandatario también dijo que los altos índices de violencia, asesinatos y desapariciones forzadas “no tienen cabida en una sociedad civilizada”.
Al ser cuestionado sobre si el clima de violencia y violaciones de derechos humanos debe condicionar la ayuda estadounidense a México, el mandatario evitó una respuesta concreta. “Creo que lo mejor que podemos hacer es ser un buen socio y construir sobre el progreso que se ha hecho”.