Este martes, la ex presidenta chilena, Michelle Bachelet, volvió hoy junto a su madre, Ángela Jeria, al lugar donde permanecieron detenidas y torturadas, tras el golpe de Augusto Pinochet, en 1973.
Bachelet, quien será candidata de la oposición a las presidenciales del próximo noviembre y su madre, participaron en un acto por los 40 años del golpe, celebrado en el Parque de la Paz Villa Grimaldi, como se llama actualmente el antiguo centro de exterminio y tortura.
Bachelet se vio emocionada y al final dejó un clavel rojo en el Muro de los Nombres, donde bajo el verso de Mario Benedetti “El olvido está lleno de memoria”, están grabados los nombres de los prisioneros ejecutados o desaparecidos en el lugar, denominado “Cuartel Terranova” por la policía secreta de la dictadura y que enfrenta a los primeros cerros de la Cordillera de Los Andes, en el sector santiaguino de Peñalolén.
“Una herida si está sucia y contaminada no se cura”, dijo tras el acto a los periodistas Michelle Bachelet, cuyo padre, un general de la Fuerza Aérea que se opuso al golpe de Pinochet, murió en la cárcel en marzo de 1974, a consecuencia de las torturas que sufrió en cautiverio.