La pobreza sigue siendo un reto de enormes proporciones en México en el que poco se ha avanzado en los últimos años por lo que para acelerar el ritmo en su combate se deben fortalecer cuatro áreas críticas: elevar el empleo, diseñar una política social más efectiva; proveer educación de calidad y fortalecer el Estado de derecho, señaló el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Lo más importante es acelerar el combate a ese ‘flagelo’, expresó Juan Pablo Castañón, presidente del CCE.
Señala la importancia de generar mayor empleo, lo que se logra a partir de mayor inversión y crecimiento, sostenido e incluyente; diseñar una política social más efectiva; fortalecer la educación de calidad que permita la movilidad social y el Estado de derecho.
Y es que aunque lento, la pobreza extrema ha venido disminuyendo en términos relativos; sin embargo, en números absolutos, son más de 11 millones de mexicanos en esta condición de pobreza extrema.
Advirtió que la estabilidad no es suficiente y para acelerar el crecimiento se requieren condiciones más propicias para el desarrollo del mercado interno y de las empresas: “Porque es allí donde se generan los empleos que brindan mejores oportunidades a las personas”.