Un hombre llamado Wayne Carter, de 43 años, amenazaba con hacerse daño a sí mismo con un cuchillo, un testigo avisó a la policía y dos agentes de Nueva Jersey, Estados Unidos, acudieron a la llamada. Lo que no se imaginaban los agentes, era que este hombre empezaría arrojarles trozos de su propio cuerpo para evitar que éstos se acercaran.
Cuando llegaron a la casa de Carter, lo encontraron en un rincón con un cuchillo. Pese la insistencia de los agentes, Carter se negó dejar el cuchillo y empezó a apuñalarse en el vientre, en el cuello y en las piernas.
Entonces fue cuando comenzó arrojar partes de su cuerpo los oficiales. Finalmente un equipo policial de operaciones especiales logró inmovilizar al hombre y llevarlo al hospital. Permanece en estado crítico y se cree que estaba bajo los efectos de alguna droga, aunque aún está sin confirmar.