Aún cuando los institutos electorales renueven a su consejo, no existe la certeza de que los resultados en el proceso electoral del 2015 se respeten, advirtió la senadora de la República, Layda Sansores Sanromán, tras señalar que los organismos encargados de garantizar la transparencia en las elecciones no son confiables y únicamente se vive un proceso de centralización del poder.
“Si me dijeran que son químicamente puros los que van a tomar las decisiones de quiénes son y los que van a elegir en los organismos electorales, pues uno podría estar de acuerdo pero para nada son angelicales. La confianza no la hay, hay que hacer un doble trabajo y una doble capacitación, pero creo que el fraude tiene un límite, la trampa no cabe y siempre digo en urna llena la trampa no cabe, por más que ellos quieren”, dijo la senadora.
Al emitir su opinión con respecto a la reforma político electoral, Sansores Sanromán consideró que la elección de consejeros y la reestructuración del Instituto Nacional de Elecciones sólo servirán para que los partidos de derecha como el PRI y el PAN cobren sus cuotas.
Asimismo, lamentó que el Gobernador del Estado no intervenga como mediador en el problema de ejidatarios de Iturbide que puede desencadenar enfrentamientos entre los grupos.
“El problema de Iturbide de los campesinos ejidatarios comprometidos es muy grave y está la autoridad burlándose de ellos, hacen asambleas que están con el resultado como acostumbramos; quieren inclinar y quedarse el gobierno con todas las canicas. El Gobernador se tiene que poner enfrente, una parte del dinero del Sur debe de ponerlo el estado y la otra la federación, pues que se ponga al frente y se vea qué se hace, si se pide dinero para quien sabe qué, para el cochinito electoral, con mayor ganas, mientras la temporada de siembra se está pasando”, agregó.
Finalmente, Sansores Sanromán arremetió en contra del presidente de la Junta de Administración y Gobierno del Congreso, Edgar Hernández, asegurando que las comparecencias sólo son espectáculos bien montados.
“Es bueno que inviten a comparecer, lo malo es que se convierten en paleros, son de risa las comparecencias de los secretarios, no pasa nada. Que se puede esperar del congreso, como en automático parece que tienen un chip como maquinita cada vez que la mandan una insinuación se encienden e inician discusiones en defensa, que podemos esperar con un líder del congreso fanfarrón y prepotente que no se abre, no permite espacios”, concluyó.