Los campeones de las Ligas Nacional y Americana, Cardenales de San Luis y Medias Rojas de Boston, respectivamente, abren este miércoles la Serie Mundial, el llamado “Clásico de Otoño” en la casa de los patirrojos, el mítico Fenway Park, con el zurdo Jon Lester frente al diestro de los pájaros rojos Adam Wainwright, en punto de las 8:07 de la noche.
Los dos primeros duelos de la serie se disputarán en la sede del “Monstruo Verde”, y los siguientes tres (el quinto en caso de ser necesario) en la casa de los Cardenales. La serie, también en caso de ser necesario, retornaría al Fenway Park para eventuales juegos seis y siete, pues la serie está pactada a ganar cuatro de siete posibles juegos.
El escenario ideal: los dos mejores del béisbol de Grandes Ligas dirimiendo el campeonato de la Serie Mundial por primera vez desde 1999.
Tanto los Medias Rojas de Boston como los Cardenales de San Luis terminaron la temporada regular con fojas idénticas de 97-65. Boston se consagró en el Este de la Liga Americana, tal vez la división más difícil de las mayores. San Luis en la Central de la Nacional, de la cual tres equipos se clasificaron a los pléiofs.
Ambos sentenciaron sus series de campeonato de liga en seis juegos, doblegando a lanzadores abridores que son los favoritos para ganar el premio Cy Young: Max Scherzer de Detroit y Clayton Kershaw de los Dodgers de Los Ángeles.
Dos escuadras casi sin fisuras, bien ensamblados con rotaciones, relevistas y bateadores de poder. David “Big Papi” Ortiz, Dustin Pedroia y Jon Lester son los baluartes de los patirrojos de Boston. El boricua Carlos Beltrán, Yadier Molina y Adam Wainwright cargan a San Luis.
“Somos unos equipos muy similares”, comentó Ortiz, el bateador designado de los Medias Rojas. “La única diferencia es que ellos tienen más pitcheo de poder. Pero tenemos veteranía y somos un equipo que no deja pasar los errores”, precisó el dominicano, ícono de los bostonianos.
Y esta edición del Clásico de Otoño, la número 109, debe zanjar la discusión sobre el equipo superior de los últimos 10 años. Boston ganó los títulos de 2004 y 2007. San Luis se consagró en 2006 y luego en 2011.
Desde que el formato de “wild card” o comodín se estrenó en 1995, siete equipos con la mejor marca de la temporada accedieron a la Serie Mundial. Tan sólo tres lograron proclamarse campeones: los Yanquis de 1998 y 2008, así como los Medias Rojas de 2007.
San Luis irá por el desquite por la barrida que sufrieron a manos de Boston en 2004, el año en el que los Medias Rojas pusieron fin a su sequía de 86 años sin campeonatos.
Esta vez, los Cardenales se han cuidado que no se repita la experiencia de cuando la serie arrancó en Boston. No pudieron conseguir hotel en la ciudad, así que debieron pernoctar en los suburbios, teniendo que ordenar pizza para comer tarde en la noche.
“Algunos de nosotros tenemos malos recuerdos de 2004 y queremos algo de revancha”, dijo el mánager de los Cardenales Mike Matheny, quien en esa serie era el receptor del equipo dirigido por Tony La Russa.
Alojarse en un hotel próximo al Fenway Park ya es un buen paso para los visitantes, pero hay otros cinco factores en juego para la Serie que arranca el miércoles, con el duelo entre el zurdo Lester y el derecho Wainwright en el montículo.