La Selección de Japón ha encontrado todas las formas para hacer ver mal a las estrellas de Grandes Ligas. Primero fue con brillante exhibición de pitcheo, y luego los bates fueron los que hablaron. Se suponía que para Hisashi Iwakuma, el Juego 2 de la Serie de Estrellas en Japón iba a ser un momento bien positivo, pero fue todo lo contrario.
Como abridor del partido por el equipo de MLB contra la selección japonesa, el derecho estelar de los Marineros tenía la oportunidad de ser profeta en su casa.
Sin embargo, el “Samurái Japón” le aguó la fiesta en ese sentido. Iwakuma permitió 10 jits y cinco carrearas en cuatro entradas este viernes en el Tokyo Dome, cargando con la derrota en un encuentro conquistado por los japoneses con marcador de 8-4. Ahora la selección local lleva una ventaja de 2-0 en la serie de cinco juegos.
“Es difícil volver después de tanto tiempo. Trataba de reencontrarme con el ritmo”, dijo Iwakuma, quien no lanzaba en un partido desde el 26 de septiembre. “Este fue un evento especial y anticipaba este juego en Japón. Estuve contento con la oportunidad de lanzar en el Tokyo Dome, sin importar el resultado”.
En los primeros dos choques de la serie, el resultado ha sido contundentemente a favor del equipo local. Después de blanquear a la escuadra de Grandes Ligas en Osaka el miércoles con un dominante pitcheo de parte de lanzadores como Kenta Maeda y Shohei Otani, los dirigidos por Hiroki Kokubo desataron un ataque ofensivo de 14 jits ante el pitcheo de Grandes Ligas el viernes. Curiosamente, Iwakuma y Tsuyoshi Wada -quien permitió dos carreras en 1.2 entrada- concedieron entre ellos siete de las ocho anotaciones de sus compatriotas.
“La verdad es que han jugado bien”, dijo sobre la selección japonesa el torpedero venezolano del conjunto de Grandes Ligas, Alcides Escobar. “Saben jugar muy buena pelota y lo han demostrado.
En los primeros dos encuentros, el Samurái Japón ha dominado a los de GL por marcador global de 10-4 y ha conectado 23 jits, comprado con apenas nueve de parte de los ligamayoristas.
Ahora la pregunta del millón es cómo reaccionará el equipo de MLB el sábado en el Juego 3, con Jeremy Guthrie subiéndose al montículo y en peligro de ya perder matemáticamente la serie en caso de volver a caer.
“Estamos aquí para ganar. Obviamente, queremos representar bien a Major League Baseball”, indicó Morneau. “Sabemos el reto que nos espera, pero trataremos de ganar los próximos tres partidos”.