La carrera por la presidencia en Estados Unidos va tomando forma. Después del lanzamiento de Hillary Clinton, la única demócrata anotada para las primarias del partido gobernante, el senador latino Marco Rubio se transformó hoy en el tercer postulante por el Partido Republicano.
Antes de su rimbombante anuncio hoy, el senador estadounidense Marco Rubio, de 43 años, anunció a sus principales donantes que buscará ser el representante republicano en las elecciones presidenciales de 2016 porque tiene “cualidades únicas” para hacer que el Partido Republicano defienda el sueño americano.
Durante una teleconferencia con donantes, Rubio criticó a la gran favorita de los demócratas, Hillary Clinton, al calificarla como “la líder del ayer” y aseguró que los comicios de 2016 serán una elección entre el pasado y el futuro.
Rubio, hijo de inmigrantes cubanos que llevó la ola del Tea Party al primer plano nacional en 2010, anunciará de forma oficial sus aspiraciones presidenciales esta tarde, con un discurso en la Torre de la Libertad de Miami.
Este monumento es el lugar en el que miles de exiliados cubanos que huían de la isla de gobierno comunista en la década de 1960 fueron registrados por vez primera por las autoridades estadounidenses.
Se espera que Rubio haga de una política exterior fuerte uno de los puntos principales de su campaña, presentándose como el republicano mejor preparado para enfrentar las amenazas contra Estados Unidos en un mundo caótico.
El apoyo a Rubio en los sondeos no llega a los dos dígitos frente a sus más probables rivales, en lo que se espera sea un atestado panorama de aspirantes republicanos. Hasta el momento, anunciaron formalmente su intención de luchar por la Casa Blanca Ted Cruz, de Texas, y Rand Paul, de Kentucky. a la espera de que haga lo propio el que fuera gobernador de Florida, Jeb Bush, quien podría ser uno de sus mayores rivales.