La Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) se unieron este viernes para boicotear el regreso a clases del ciclo escolar 2015-2016 en Acapulco, principal municipio de Guerrero, en rechazo a la reforma educativa y al proceso de evaluación.
Según los dirigentes son poco más de 8,000, de los 15,000 maestros y administrativos en Acapulco, los que no regresarán a clases este lunes 24 de agosto.
Sin embargo, el magisterio del SNTE definió en asamblea la tarde de este viernes que su paro será por 48 horas, plazo en el que convocarán a los padres de familia en los planteles educativos para que se sumen a las acciones que llevarán a cabo en las próximas semanas.
Además acordaron sumarse al paro nacional que prevé realizar la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) para el próximo 14 de octubre. El líder en Acapulco del grupo del SNTE, Isaías Arellano explicó que acordaron sumarse a las acciones de la CETEG para evitar que siga el proceso de evaluación, pues en los próximos días iniciará la segunda fase del proceso de evaluación para los maestros con bases.
Dentro de los acuerdos tomados por la SNTE está también el de pedir a los padres de familia no pagar cuotas de inscripción ni para “apoyos” de las escuelas, pues es obligación del gobierno el sostenimiento de la infraestructura escolar.
Por su parte, la CETEG determinó que el paro laboral será indefinido y que mantendrán la “unidad” con este sector del SNTE para las acciones que llevarán a cabo en los próximos días.