Aunque el promedio de infidelidades en el matrimonio entre hombres y mujeres aun varía de la acuerdo a la región geográfica, un estudio reciente confirma lo que muchos hombres prefieren ignorar: las mujeres también engañan a sus esposos pero éstas se niegan a un divorcio.
De acuerdo al estudio que fue presentado durante el encuentro anual de la American Sociological Association, en su edición 109, las mujeres casadas que son infieles son motivadas por querer más sexo y más pasión. y es que de acuerdo con Eric Anderson, sexólogo de la Universidad Winchester y director de AshleyMadison, “ser feliz en el matrimonio es muy diferente a ser feliz en la cama”.
Así, Anderson y sus colegas, estudiaron a 100 mujeres heterosexuales casadas, de entre 34 y 45 años de edad. Los investigadores centraron sus esfuerzos en analizar las conversaciones que estas féminas sostenían con sus posibles “ligues” en AshleyMadison, una página popular entre los infieles del mundo.
Aunque las mujeres aceptaron querer más pasión y sexo con otra persona, todas se negaron a la posibilidad de abandonar a sus maridos, eran muy claras al señalar que “no buscaban un esposo nuevo” pero sí un nuevo compañero de aventuras.
Aunque al principio Anderson y su equipo pensaban que las mujeres eran infieles porque no estaban enamoradas de sus maridos, más adelante se dieron cuenta que no era así: “Nuestros resultados demuestran que la monotonía sexual es producto de las relaciones monógamas duraderas. Lo más predecible de una relación es que cuanto más progrese, la calidad y frecuencia del sexo tienda a disminuir. Este es el motivo porque nos acostumbramos y a la vez nos aburrimos del mismo cuerpo”, abundó Anderson.
El estudio también revela que la diferencia entre las infidelidades de las mujeres y los hombres, es que las primeras por lo regular engañan a sus esposos sólo con una persona diferente, mientras que los hombres son capaces de engañar a sus esposas con más de una mujer.