Obispos de México coincidieron —en entrevistas por separado— en negar que la anunciada visita del Papa Benedicto XVI a México, prevista para marzo de 2012, tenga algún interés político o pretenda influir en las próximas elecciones presidenciales del país.
En entrevistas por separado con Notimex, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, y el obispo auxiliar de esa diócesis, Eugenio Lira Rugarcía, señalaron que los viajes del líder católico no están condicionados a las coyunturas electorales de las naciones.
“Los tiempos de los candidatos y las elecciones no son los tiempos del Papa, el pontífice va porque quiere ir a México, que coincida es otra cosa, que algunos pretendan aprovecharlo es también otra cosa, pero son tiempos distintos”, sostuvo Sánchez.