Organizaciones internacionales acusan que el desdén hacia la prensa y la no tolerancia a la crítica por parte del Estado mexicano ha creado un ambiente que no garantiza la libertad de expresión ni la protección a los periodistas.
Señalan que a pesar que el gobierno aceptó algunas de las recomendaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), del relator especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA), y de otros organismos internacionales, como por ejemplo, la implementación del mecanismo de protección a periodistas o la creación de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE), no significa que el gremio periodístico trabaje con libertad y garantías, sino que se encuentra sólo, en un ambiente de total violencia sin importar la fuente que se cubra.
El representante de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), Javier Hernández Valencia, informó que la ONU determinó que la mayoría de los periodistas mexicanos asesinados desde hace 10 años, eran comunicadores locales y no corresponsales de guerra o comunicadores fuera de su lugar de origen.
Agregó que el ”54 por ciento de estos periodistas caídos eran periodistas hombres y mujeres que trabajaban con temas locales” y que su muerte estaba relacionada directamente con investigaciones de corrupción, abuso de poder, violencia.
Perseo Quiroz Rendón, director ejecutivo de Amnistía Internacional (AI) México opinó que el contexto de impunidad, en donde la aplicación de la ley tiene muchas deficiencias, ha impedido que haya justicia en ataques contra la prensa.
El representante de la ONU dijo que en México y otros países que enfrentan “un déficit democrático”, el periodismo actúa como contrapreso del gobierno, como una actividad que busca reivindicar el actuar del Estado; pero aquellos reporteros que investigan casos sobre abuso de poder, corrupción, violencia, violaciones a derechos humanos, son atacados.
Agregó que la protección a periodistas es algo nuevo en la ONU y que los casos que se han suscitado en México han empujado “un camino para transitar en esa dirección”.
Víctor Arrazola de Reporteros Sin Fronteras (RSF), destacó que para enfrentar los ataques a la prensa, primero, el gremio debe hacer una autocrítica y eliminar las malas prácticas que existen centro del propio periodismo.