Panamá se consideró un “chivo expiatorio” y rechazó ser un paraíso fiscal luego de revelarse documentos que involucran a gobernantes, políticos, artistas y deportistas en supuestas prácticas para eludir el pago de impuestos.
Pareciera ser que Panamá es utilizada como un chivo expiatorio de esta situación”, expresó el ministro de la Presidencia, Álvaro Alemán, en rueda de prensa para reaccionar a la investigación periodística “#PanamaPapers” (“Papeles de Panamá”).
“Rechazamos la calificación de que Panamá es un paraíso fiscal”, dijo por su parte el ministro de Economía y Finanzas, Dulcidio de la Guardia.
La investigación periodística, basada en millones de documentos de Mossack-Fonseca, un bufete de Panamá dedicado a crear sociedades en paraísos fiscales, reveló un entramado de ocultamiento de capitales -en el cual podría existir el lavado de dinero- en el que participan también empresarios, actores y artistas.
Panamá está dispuesto a cooperar con todos los países que lo soliciten”, dijo el ministro de la Presidencia.
Los funcionarios del gobierno canalero cuestionaron por qué solo el nombre de Panamá figura como supuesto paraíso fiscal, cuando en los documentos revelados por un centenar de medios en el mundo aparecen otras 20 jurisdicciones fiscales.
Por su parte el ministro de Finanzas de Francia, Michel Sapin, anunció este martes que a raíz de la publicación de los “Papeles de Panamá”, su gobierno volverá a inscribir a la nación centroamericana en una lista de países “no cooperadores” en temas fiscales.