El encuentro de Francisco y Castro es visto en el Vaticano como la antesala de un “histórico” viaje que hará el Sumo Pontífice en septiembre a Cuba y Estados Unidos, tras su intervención en el acercamiento entre ambos países anunciado en diciembre pasado.
Es probable que el encuentro sirva para pulir detalles de esa visita, que ni siquiera tiene todavía duración acordada, ya que por el momento sólo se conoce que será la primera etapa del viaje que llevará al pontífice a Estados Unidos el 22 de septiembre.
En el marco del 80 aniversario de las relaciones bilaterales entre Cuba y El Vaticano, que se celebra en este 2015, el encuentro es visto por los vaticanistas como “otra confirmación” del “rol de arquitecto” del acercamiento entre Obama y los Castro que ha tenido el Sumo Pontífice.
El gobernante cubano llegará a Italia desde Moscú, donde asiste este sábado a los actos del 70 aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial.
Aunque Cuba y El Vaticano nunca rompieron relaciones diplomáticas, los analistas suelen resaltar especialmente en los 80 años de vínculo la “histórica” foto de la visita de Fidel Castro a Juan Pablo II en 1996, dos años antes de que el comandante recibiera al entonces Sumo Pontífice en el aeropuerto de La Habana, en el marco de una visita de cinco días a la isla.
Los últimos contactos entre Italia y Cuba tuvieron lugar en marzo, cuando el ministro de Asuntos Exteriores, Paolo Gentiloni, se entrevistó en La Habana con Raúl Castro y lo invitó a visitar el país.