Un choque entre militares y guerrilleros provocó al menos 11 muertos en las filas del Ejército ensombreció el diálogo de paz que el gobierno colombiano y las FARC celebran desde noviembre de 2012.
Por su parte el presidente Juan Manuel Santos reclamó mayor celeridad para alcanzar un acuerdo definitivo y ordenó reanudar los bombardeos a campamentos insurgentes.
El incidente fue calificado por Santos como “un ataque deliberado, no fortuito de las FARC”, que “implica un claro rompimiento de la promesa de un cese del fuego unilateral”, que esa guerrilla inició el pasado 20 de diciembre.
Santos aventó las especulaciones acerca de que las negociaciones de diálogo podrían naufragar, al afirmar que “estos graves hechos demuestran la necesidad de acelerar negociaciones que pongan fin al conflicto. Esta es la guerra que tenemos que terminar, dijo.
“Este hecho no quedará impune. Ordené a las Fuerzas Armadas levantar la suspensión a los bombardeos”, aseveró además el Presidente.
En una alocución que pronunció esta tarde en Cali, anunció que no habrá cese bilateral del fuego salvo que se dé “como consecuencia de un acuerdo serio, definitivo y verificable de terminación del conflicto”, y anunció que “las Fuerzas Armadas no han suspendido ni suspenderán sus acciones de protección a la población civil y control territorial”.
Santos reaccionó así a declaraciones de alias Pastor Alape, uno de los negociadores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), quien dijo en La Habana que hechos como el ocurrido en Cauca demuestran que las partes deben declarar una tregua bilateral.
Las FARC declararon una tregua unilateral por tiempo indefinido el 20 de diciembre último, pero fuentes de organismos militares y privados dijeron que esa medida fue rota en varias oportunidades, y el gobierno dejó sin efecto hoy, tras el ataque, una suspensión de bombardeos contra campamentos guerrilleros que aplicó en los últimos 35 días.
El ex presidente Álvaro Uribe -férreo opositor a los diálogos de paz- le pidió a Santos que no “engañe” más al país. “La paz de Santos es el exterminio de las Fuerzas Armadas”, señaló Uribe en su cuenta de Twitter, en la que en otro mensaje le pidió a su sucesor: “no nos engañe más por favor, no justifique el asesinato de nuestros soldados con el cuento de la guerra que quiere terminar”.
El defensor del Pueblo de Colombia, Jorge Armando Otálora, le exigió a las FARC explicaciones sobre el ataque ante lo que llamó “contradictoria actuación”, habida cuenta que “por un lado hablan de cese unilateral que ellos mismos ofrecieron y por otro lado encontramos un incumplimiento abierto de este cese unilateral”.
El Ejército colombiano confirmó que la Columna Móvil Miller Perdomo de las FARC fue la autora del ataque de esta madrugada contra miembros del Batallón de Combate Terrestre 110, perteneciente a la Brigada Móvil 17 de la Fuerza de Tarea Apolo, en una zona rural del municipio de Buenos Aires (Cauca).