Peor que la derrota, es la vergüenza que sintió Travis Wolford, al defecar sobre el ring ante la sorprendida mirada de los asistentes del evento.
Wolford perdía el combate contra Daniel Cooper hasta que decidió cancelar todo porque sintió que ‘algo’ se había salido de su esfínter a mitad de una llave a la que estaba a punto de ser sometido.
Entendiendo la problemática, Cooper (de calzón blanco) decidió detener el combate y dejar que Wolford se levantara, sólo para descubrir que algunos trozos de sus heces se habían escapado de su calzón, ensuciando el ring y dejando un apestoso testimonio del humillante accidente.
El pobre Wolfrod no tuvo de otra más que retirarse del lugar con la cabeza baja y la mirada fijada al horizonte.
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