“El uso extendido de pesticidas y herbicidas, así como la quema indiscriminada de árboles de la región ha demostrado que afecta al sector apícola, ya que cada vez más, las abejas cuentan con una flora reducida para su producción de néctar, lo que causa grandes daños al sector mielero”, explicó José Alfredo Maas Aké, productor de miel.
“La apicultura está siendo dañada, muchos años atrás había más vegetación y más árboles que son los que le dan la calidad a nuestra miel, el sabor y el color, pero los productores de cultivos han acabado con la flora, esto se refleja porque ahora sólo quedan sembradíos y la abeja ya no tiene suficiente néctar para producir”, explicó el productor Maas Aké.
Comentó que el abuso de pesticidas y herbicidas en los cultivos campechanos afecta a las abejas ya que muchas de ellas mueren al entrar en contacto con dichos químicos, mientras que otras llevan consigo el contaminante a la colmena, y pone en riesgo la calidad de la miel.
El productor dijo que lo más óptimo, para tratar de contrarrestar el daño causado al sector, es implementar campañas de conciencia, sobre todo entre los hombres de campo para que usen líquidos menos agresivos al insecto himenóptero, además de aplicar programas que eviten la deforestación de la flora campechana.
“Se necesitan campañas para cuidar la vegetación y apoyos al campesino para que no se dediquen a deforestar el campo”, precisó Maas Aké, productor de miel.