Para evitar la propagación de casos, el Gobierno italiano firmó un nuevo decreto por el que prorroga al menos hasta el 8 de marzo, el cierre de comercios, museos y escuelas en los once municipios más afectados por el coronavirus.
Autoridades italianas han dividido al país en tres zonas: la roja, la más castigada y que comprende estos once municipios; la amarilla, que incluye el resto de localidades de Lombardía, Véneto y Emilia Romaña, tres regiones que son las que más casos acumulan y finalmente el resto del territorio nacional para el que se han dispuesto otras medidas.
En la zona roja se prohíbe el acceso o la salida, se mantienen suspendidos eventos de cualquier tipo, las escuelas seguirán cerradas, igual que los museos, institutos culturales y comercios.
En tanto, en las oficinas públicas y las demás empresas mantendrán interrumpida su habitual actividad, a excepción de las que desarrollen una labor esencial y estrictamente necesaria.
En la zona amarilla, se mantienen cancelados los eventos deportivos y el resto de competiciones que aglutinen a masa de gente.