Los presuntos asesinos del empresario campechano Jesús Francisco Uribe Ovando, conformada por la pareja Rocío Damián Zacarías y Edgar Candelario González Pérez, fueron puestos en libertad por el delito de cohecho, sin embargo, minutos después fueron reaprehendidos por el delito de homicidio calificado.
Rocío y Edgar Candelario, ya festejaban su libertad después de que la juez manifestó que la pareja fuese retenida de manera ilegal y de que la PGJE no brindara los pormenores del aseguramiento de Edgar Candelario, quien presuntamente fue señalado por Rocío como su cómplice en el homicidio perpetrado en su casa, ubicada en la colonia Leovigildo Gómez.
Sin embargo al abandonar el penal de nueva cuenta fueron reaprendidos por el delito de homicidio calificado, del cual se obtuvo el auto formal prisión la cual fue girado por el Juez Segundo de lo penal, Pedro Brito Pérez.
El mandamiento judicial fue girado después de que el Ministerio Público del fuero común consignó el expediente AP/6080/9na/2012 al Juez Segundo que conoce la causa penal.
Rocío y Edgar Candelario permanecen al interior del Cereso de Kobén, donde en las próximas 72 o 144 horas el juzgador les determinará su situación jurídica.
Cabe señalar que primero fueron consignados por el Ministerio Público del fuero común la noche del domingo 9 de septiembre por el delito de cohecho ante la juez Primero de lo Penal, Diana Comas Soberanis, la cual no encontró los elementos suficientes para emitir el auto formal prisión durante el transcurso de ayer.