Eduardo Arellano Félix, último de la estirpe de la familia de narcotraficantes, logró una condena de 15 años, luego de declararse culpable este viernes, en San Diego, de ayudar a enviar cientos de millones de dólares de ganancias de las drogas desde Estados Unidos.
Arellano Félix se declaró culpable bajo un acuerdo con la fiscalía federal que le significará 15 años de prisión. Una vez que cumpla la sentencia será deportado a México.
Y es que este jueves el narcotraficante cambió su declaración a culpable ante el juez Larry Alan Burns, quien condenó a sus otros dos hermanos, Benjamín y Francisco Javier Arellano Félix, sin embargo fue Eduardo quien logró la condena más baja.
La audiencia inició a las 10:00 horas en punto. La sala 14 A de la corte federal del distrito sur de California estuvo repleta. De la puerta del costado derecho apareció un Eduardo Arellano Félix sonriente, aunque deteriorado físicamente.
Larry Alan le informó que si aceptaba su culpabilidad en los hechos no podría reclamar bienes de hasta 50 millones de dólares procedentes de las ganancias de la organización.
El juez Burns aceptó su declaración de culpabilidad y lo citó a una audiencia el 19 de agosto a las 9:30 de la mañana, sin embargo anticipó que por el primer cargo se le imputará una condena de 5 años y por la segunda de 10.
Por lo que el narcotraficante sólo purgará una condena de 15 años, incluso con la posibilidad de salir en libertad condicional tres años antes.