La participación de la mujer en las etapas importantes de la historia de nuestro país no ha sido valorada en su totalidad y su rol frecuentemente se ve limitado a las tareas más tradicionales, afirmó Ligia Nicté-Ha Rodríguez Mejía; mientras que Asdrúbal Rafael Guillén Lugo habló sobre los obstáculos que se siguen enfrentando para que haya mujeres en la vida política de nuestro país, y Araceli Campuzano Garza dijo que es importante tomar conciencia “de en qué lugar estamos nosotras las mujeres, pues somos las primeras que nos saboteamos”, subrayando que “cuando nosotros reconozcamos realmente todo aquello que somos capaces de hacer, trabajaremos diferente como sociedad”.
Lo anterior, durante el Conversatorio “Del Sufragio Femenil al Paritarismo” que organizó el Congreso del Estado de Campeche, y que se llevó a cabo en la sala “María Lavalle Urbina” del Palacio Legislativo, con la presencia del diputado Ramón Méndez Lanz, presidente de la Junta de Gobierno y Administración, y compañeros legisladores.
Al dar la bienvenida, la diputada Alejandrina Moreno Barona señaló que este mes hay fechas conmemorativas como el Día de la Mujer Rural, el Día Nacional contra la Discriminación, el Aniversario del Voto de la Mujer en México, el Día de la lucha contra el cáncer de mama, y que esta actividad (el conversatorio) “no es un tema de género, es una cuestión de tener perspectiva, responsabilidad ciudadana, reflexión social, pero sobre todo corresponsabilidad”.
Agregó que como diputadas y diputados de esta Legislatura “estamos dando lo mejor de nosotros con un trabajo en equipo, haciendo historia precisamente con un plan definido, con iniciativas de ley aprobadas en beneficio de los ciudadanos campechanos. Y más que una celebración, el día de hoy es un reconocimiento al esfuerzo de tantas mujeres que han hecho posible que el día de hoy estemos aquí representando a la ciudadanía y el poder ir haciendo un cambio en la democracia mexicana”.
Posteriormente la diputada María Asunción Caballero May explicó la dinámica del evento, donde primero los ponentes expusieron sus temas y luego hubo una etapa de preguntas y respuestas con los presentes, entre los que se encontraban los diputados María del Carmen Pérez López, Elia Ocaña Hernández, Julio Alberto Sansores Sansores, Andrea del Carmen Martínez Aguilar, Rosario de Fátima Gamboa Castillo, Marina Sánchez Rodríguez, Ángela del Carmen Cámara Damas, Edda Marlene Uuh Xool y Ana Graciela Crisanty Villarino; la directora del Instituto estatal de la Mujer, profesora Dulce María Cervera Cetina; regidoras y síndicas del Ayuntamiento de Campeche, y ciudadanía en general.
La primera expositora fue la licenciada Ligia Nicté-Ha Rodríguez Mejía, directora de Asuntos Jurídicos de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Campeche, quien significó que la mujer mexicana a lo largo de los tiempos ha intervenido en las tareas más arduas y difíciles en la comunidad, y también ha estado presente en las luchas libertarias de la Independencia, la Revolución y el desarrollo de la nación, sin embargo esta participación no ha sido valorada en su totalidad y su rol frecuentemente se ve limitado a las tareas más tradicionales.
Sobre los derechos políticos de la mujer dijo que fue hasta el año de 1953 cuando quienes abrigaron la causa, vieron premiados sus esfuerzos a través de la reforma al artículo 34 constitucional propuesta por el entonces Presidente Adolfo Ruiz Cortines, a fin de que se dotara a la mujer el derecho a votar y ser votadas, haciendo alusión al discurso del entonces senador Aquiles Elorduy García, cuando habló en contra de la citada reforma al momento del debate previo a la votación.
Tocó asimismo el tema del sexismo, y dijo que éste se produce cuando las diferencias se tornan excluyentes y jerarquizantes, valorando en una de las partes lo masculino sobre lo femenino, añadiendo que el problema se ubica en las sociedades y culturas cuando la representación y significado de lo masculino se valora como superior y como universal, y por lo tanto se descalifica e invisibiliza lo femenino.
A su vez, el licenciado Asdrúbal Rafael Guillén Lugo, vocal de Capacitación Electoral y Educación Cívica de la Junta Local Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral, manifestó que en la política a nivel mundial, donde sólo hay 17 jefas de Estado, hay pocas mujeres presentes en la vida política. “México, con las actuales normas de paridad de candidaturas está dando pasos importantes en esa dirección, y a nivel del Congreso federal son 42 por ciento de las mujeres que integran la actual Legislatura de la Cámara de Diputados”.
Su plática giró en torno a los obstáculos que se siguen enfrentando para que haya mujeres en la vida política de nuestro país: una mujer que no se elige a sí misma; los que imponen las organizaciones políticas a las que pertenecen, donde las mujeres deben negociar los espacios que les pertenecen; y las barreras que se construyen a nivel social, en donde el electorado más que ver si es hombre o es mujer debe ver que es candidato o candidata.
Por último, la licenciada en Pedagogía Araceli Campuzano Garza, directora del Centro de Estimulación Temprana, Asesoría Pedagógica y Familiar, expresó que es importante “tomar conciencia de en qué lugar estamos nosotras las mujeres, pues somos las primeras que nos saboteamos”, subrayando que “cuando nosotros reconozcamos realmente nuestras capacidades, todo aquello que somos capaces de hacer, trabajaremos diferente como sociedad”.
Y añadió: “Luego entonces la pregunta sería qué estamos dipuestas a hacer nosotras para cambiar”. Al final, dijo, no se trata de juzgar, sino de modificar, de construir un mejor presente, algo mejor para nuestro futuro y para la sociedad donde viven nuestras familias, pues las mujeres son la columna vertebral de la familia.
Por último, puntualizó que el feminismo “no es duro contra los caballeros, sino una lucha en la que nosotros debemos reconocer cuáles son nuestros derechos y hacerlos valer. El feminismo es la lucha que las mujeres han realizado por la defensa y protección de sus derechos que se han logrado hasta el momento”, reconociendo que tristemente las mismas mujeres se van bloqueando, se van invisiblizando a ellas mismas, “no somos capaces de empoderar a las mujeres”.