Después de estar inactivas prácticamente desde hace dos años las estancias infantiles con el regreso a las clases presenciales ven una esperanza de poder reactivarse económicamente así lo expuso la representante Wendy Escalante Reyes.
Pero también reconoció que será difícil este proceso porque hay temas como el pago de permisos que deberán plantearse sobre todo a la autoridad municipal para buscar con donaciones o facilidades de pago que les permitan ir poco a poco volviendo a la normalidad.
Recordó que antes de la pandemia en la ciudad capital laboraban unas 50 estancias infantiles que cerraron por la pandemia por lo que se hará todavía el recuento de cuantas estarían en condiciones de volver a abrir.
Adelantó que esperarán a que llegue la nueva administración municipal y el gobierno Estatal para que las propietarias de estas estancias infantiles se reúnan y puedan tener una estrategia clara de reactivación