Pescadores ribereños buscarán el diálogo con el gobernador electo, Alejandro Moreno Cárdenas, para pedirle que en su sexenio se apliquen estrategias que permita el combate a la depredación y las autoridades realicen un censo del número de embarcaciones con permiso, pero en especial, que las autorizaciones se realicen a los verdaderos hombres de mar y no a familiares, amigos y compadres, como ocurrió en la presente administración estatal.
En conferencia de prensa, Mario Luis Quej Cruz, presidente del Frente Común Organizado de Pescadores Ribereños y Ricardo Chulin Dzul, coordinador de la Federación de Cooperativas “El Sábalo” reprocharon a la Secretaría de Pesca que no tenga actualizado el padrón de embarcaciones y pescadores permisionarios, pues mientras que a nivel estatal se tiene un censo de 5 mil 800 motores, a nivel nacional el número asciende a 6 mil 900.
“Con esta administración estatal, la entrega de permisos a pescadores ha sido bajo corruptelas, porque hay quienes tienen años haciendo la solicitud, sin tener respuesta favorable, que nos den una explicación de dónde se acabaron los permisos, a quiénes se los otorgaron, en base a qué criterio, porque el sector que hizo su solicitud, nunca se los dieron, pero por otras fuentes sabemos que los permisos se los dieron a grandes empresarios”, dijo Quej Cruz.
Comentaron que en el caso de inspección y vigilancia, las autoridades estatales y federales les han quedado a deber, pues no han implementado acciones que acaben con la depredación, por lo que a unos días del inicio de la temporada de pulpo, se espera baja captura y pérdidas para el sector.
Advirtieron que si las autoridades no redoblan la vigilancia de los litorales campechanos, se organizarán para hacer policías comunitarios sólo que en versión marítima, para vigilar los mares desde Calkiní hasta Champotón y detener a quienes incurran en delitos.