Toda una vida de trabajo le bastó al desaparecido actor Robin Williams para dejar asegurados los gastos de sus hijos y es que esta mañana se ha dado a conocer que serán 50 millones de dólares los que se repartirán entre sus tres herederos.
Ahora se sabe que el testamento del actor, firmado por é, el 11 de enero de 2011, fue revelado a sus familiares tres semanas después de su muerte. Los herederos son Zachary de 31 años, Zelda de 25 y Cody de 22 años.
Como recordará Robin Williams decidió quitarse la vida el 11 de agosto pasado, día en que su asistente lo encontró colgado de un cinturón en su casa en el condado Marin, California. Tenía 63 años.
Sus hijos son atendidos a través de un fideicomiso establecido por el actor, que ahora está siendo dirigido por un administrador. Dicho fideicomiso establece que: “sus hijos recibirán el dinero… pero en los siguientes pasos… Cuando cumplan 21 años obtendrán un tercio de su total. Al cumplir 25 años podrán disponer de la mitad de lo que les queda y por último al cumplir 30 años cada uno podrá hacer uso de su parte completa”.